Javier Alonso Ballesteros Vargas
Estudiante de Economía, UCR
Estudiante de Economía, UCR
A principio de año, en una reunión de representantes estudiantiles universitarios, le preguntaron a un grupo de ellos: ¿qué es autonomía? Según el Diccionario de la Real Academia Española, autonomía tiene cuatro acepciones, una de las cuáles dice: “Condición de quien, para ciertas cosas, no depende de nadie.” En aquel momento, inmediatamente se notó la dificultad que representó para los estudiantes definir y explicar qué entendían por autonomía, autonomía estudiantil universitaria por el contexto.
A mi parecer, tratar de definir o explicar mediante palabras qué entendemos por autonomía es inútil; lo que debemos hacer es creerla, vivirla y demostrarla. Autonomía estudiantil universitaria es caminar lado a lado (el estudiantado y el personal docente-administrativo), claramente sobre calles y avenidas diferentes, a velocidades distintas, en tiempos diferenciados y con proyectos propios; pero proyectos complementarios y poniendo la vista en una misma meta: el desarrollo humanista e integral del presente y el futuro de nuestro país, del ser de la universidad, de los estudiantes.
Autonomía no es darnos la espalda, caminar en sentidos contrarios y competir cual duelo vaquero. No confundamos autonomía con anarquía. No construyamos muros donde deberían existir puentes. Seamos verdaderos autónomos. Reclamemos libertad y no libertinaje. Exijamos nuestros derechos mientras cumplimos nuestros deberes.
Tenemos la necesidad de reaccionar, cuestionar, pensar, discutir, consensuar, plantear y ejecutar ideas y acciones que refresquen la vida universitaria; volvamos a obligar a los profesores a que aprendan de los estudiantes al expresar nuestros puntos de vista bien argumentados, al respetar su libertad de cátedra mientras demandamos respeto a favor de los criterios opuestos, a favor de la universalidad de ideas y de la verdadera libertad de expresión.
Seamos autónomos a través del protagonismo. Participemos en todas las instancias donde tenemos espacios, voz y voto. Seamos autónomos al elegir nuestros representantes estudiantiles, al recordarles que llegar a un puesto es sólo el inicio de su trabajo, que tienen que trabajar por y para sus representados y que nunca olviden que si incumplen, Dios, la Patria y la Comunidad Estudiantil se lo demandarán.
El próximo jueves 23 y viernes 24 de octubre serán las elecciones federativas de la Universidad de Costa Rica, una última vez los y las insto a ser autónomos. Demostremos nuestra autonomía yendo a votar, decidiendo por nosotros mismos y por la universidad, siendo parte del cambio.
A mi parecer, tratar de definir o explicar mediante palabras qué entendemos por autonomía es inútil; lo que debemos hacer es creerla, vivirla y demostrarla. Autonomía estudiantil universitaria es caminar lado a lado (el estudiantado y el personal docente-administrativo), claramente sobre calles y avenidas diferentes, a velocidades distintas, en tiempos diferenciados y con proyectos propios; pero proyectos complementarios y poniendo la vista en una misma meta: el desarrollo humanista e integral del presente y el futuro de nuestro país, del ser de la universidad, de los estudiantes.
Autonomía no es darnos la espalda, caminar en sentidos contrarios y competir cual duelo vaquero. No confundamos autonomía con anarquía. No construyamos muros donde deberían existir puentes. Seamos verdaderos autónomos. Reclamemos libertad y no libertinaje. Exijamos nuestros derechos mientras cumplimos nuestros deberes.
Tenemos la necesidad de reaccionar, cuestionar, pensar, discutir, consensuar, plantear y ejecutar ideas y acciones que refresquen la vida universitaria; volvamos a obligar a los profesores a que aprendan de los estudiantes al expresar nuestros puntos de vista bien argumentados, al respetar su libertad de cátedra mientras demandamos respeto a favor de los criterios opuestos, a favor de la universalidad de ideas y de la verdadera libertad de expresión.
Seamos autónomos a través del protagonismo. Participemos en todas las instancias donde tenemos espacios, voz y voto. Seamos autónomos al elegir nuestros representantes estudiantiles, al recordarles que llegar a un puesto es sólo el inicio de su trabajo, que tienen que trabajar por y para sus representados y que nunca olviden que si incumplen, Dios, la Patria y la Comunidad Estudiantil se lo demandarán.
El próximo jueves 23 y viernes 24 de octubre serán las elecciones federativas de la Universidad de Costa Rica, una última vez los y las insto a ser autónomos. Demostremos nuestra autonomía yendo a votar, decidiendo por nosotros mismos y por la universidad, siendo parte del cambio.
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1 comentarios:
Estimado señor Ballesteros,
Es motivador saber que jóvenes como usted se ocupan de un tema tan particular como lo es la autonomía estudiantil universitaria, permítame una pequeña contribución al tema. A mi parecer, la autonomía estudiantil(AE) va un poco más allá de lo mencionado por usted. La AE es un poder funcional que posee toda persona, y susceptible de ser activado, para gobernarse a sí mismo, para autogestionar la actuación estudiantil, para tomar decisiones propias, para detectar problemas y presentar soluciones, en fin, para ser un ciudadano libre de toda atadura física y mental, cognoscitiva, espiritual E IDEOLÓGICA, y convertirse en una persona satisfecha y útil a la sociedad en la cual se desenvuelva. La Universidad está en la obligación social y moral de velar por el desarrollo de la autonomía así concebida. Gracias por permitirme su espacio.
Prof. Raiza Nieves
Docente universitaria
Caracas-Venezuela
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